Si entre los polos norte y sur de un imán potente hacemos girar una
espira o bobina los extremos estén conectados a dos anillos, aislados
del eje, mediante unas escobillas, aparece tensión en los anillos.
El valor de la corriente varía en función de la posición de la bobina.
En cada vuelta pasa por un valor máximo y otro mínimo. Se conoce como
amplitud los valores que adquieren la corriente en cada instante.