Un informe es un un texto expositivo y
argumentativo cuyo objetivo es presentar de manera clara y detallada
unos hechos, partiendo de datos comprobados, dirigidos a un
destinatario que, normalmente, deberá tomar una decisión respecto al
tema tratado en el texto.
Hay
diferentes tipos de informe: técnicos, administrativos, académicos,...
pero todos están regulados por la lógica y la cronología del los
hechos.
Hay
que tener en cuenta que:
- Su valor está en los datos.
- Se busca la objetividad, que se ajuste a los hechos y que
evite las vacilaciones o los titubeos.
- La redacción no puede ser ambigua ni confusa; un informe es un
texto claro, preciso y exacto.
¿Cómo se realiza un informe?
Para
elaborar un informe, es necesario seguir una serie de pasos:
- Preparar un guión, en el que consten de forma ordenada los puntos
que se van a tratar y los apartados en que se van a organizar.
- Recopilar información sobre la persona o el asunto objeto del
informe. La información se puede obtener mediante la consulta de libros
u otros documentos, o bien mediante una investigación «sobre el
terreno», que puede incluir encuestas y entrevistas.
- Seleccionar la información obtenida y organizarla (estructura).
Estructura
- Introducción
- Debe entenderse como una guía que facilite la lectura del
informe. En la introducción suele haber:
- una exposición breve del tema central, el "qué" del informe,
- la explicación de sus objetivos principales,
- una enumeración de los criterios que se han utilizado para
elaborar el análisis.
- las razones o causas de su elaboración,
- el método utilizado para tomar los datos del informe,
- las limitaciones del informe,
- las fuentes de la información y la definición de conceptos clave
para comprender los resultados o las conclusiones del informe (esto
sucede a veces en informes con un contenido muy especializado).
- Cuando la introducción es muy breve, por ejemplo, si consta de
dos o tres párrafos, no hace falta poner título. Si es más larga, en
cambio, es mejor indicar que se trata de la introducción.
- El cuerpo del informe
- Es la parte esencial. En ella se exponen los datos, se definen,
analizan, interpretan, discuten, valoran y desarrollan los aspectos que
ayudan a cumplir los propósitos o finalidades del informe.
- Dentro del cuerpo del informe puede ser necesario incluir
diagramas o tablas que ilustren lo que queremos decir. Su función debe
ser la de apoyar lo que se apunta en el texto. En muchos casos, habrá
que valorar la conveniencia de que estas tablas y diagramas aparezcan
dentro del cuerpo del informe, o bien en los anexos finales, con la
referencia que permita localizarlos adecuadamente.
- Conclusión y recomendaciones
- A partir de los hechos y el análisis del apartado anterior,
se llega a una conclusión, a partir de la cual pueden introducirse
recomendaciones o formas de actuación.
- Anexos
- Recogen material pertinente para comprender el informe. Suponen
un apoyo a la información que se ha aportado en el texto. Los
materiales que se aporten deben presentarse en la forma que más fácil
de comprender le resulte al destinatario. En los anexos se incluyen
tablas, gráficos (de barras, circulares, de líneas, de áreas),
pictogramas fotografías, etc..